Meta, la empresa matriz de Facebook, parece decidida a recuperar terreno en un espacio digital que había abandonado hace apenas un par de años: las ofertas de empleo. En un movimiento que ha tomado por sorpresa a muchos, la compañía ha reactivado su función de publicaciones de trabajo dentro de Facebook, apostando por una fórmula que combina la potencia de su base de usuarios con el auge de los empleos locales y de servicios.
La idea no es nueva. Facebook ya había incursionado en el terreno del empleo en 2017, pero terminó cerrando esa función en 2023 tras varios recortes y una reestructuración de prioridades. Sin embargo, la creciente demanda de trabajos locales y el éxito de plataformas como TikTok Resumes, que promueven candidaturas a través de vídeos, han puesto de nuevo el foco en un segmento que, con las herramientas adecuadas, puede ofrecer grandes oportunidades.
Lo más interesante de este regreso es su enfoque. Meta no quiere competir directamente con LinkedIn en el terreno de los altos ejecutivos ni con portales corporativos como Indeed o Glassdoor. Su objetivo es mucho más específico: captar las ofertas de empleo que, tradicionalmente, se pegaban en escaparates o se compartían por WhatsApp. Hablamos de trabajos en comercios, restauración, logística o mantenimiento. Oficios que siguen siendo el motor silencioso de las ciudades y que ahora buscan digitalizarse.
Estas ofertas aparecen ahora en una pestaña dentro del apartado de Marketplace de Facebook, pero también pueden ser vistas en grupos locales o desde las propias páginas de negocios. De momento, la función está disponible únicamente en Estados Unidos, aunque no se descarta su expansión si la adopción resulta positiva.
Uno de los elementos clave en esta nueva etapa es la apuesta por la visibilidad algorítmica. Los puestos se mostrarán a usuarios mayores de 18 años según su ubicación, intereses y actividad en la plataforma, lo que convierte a Facebook en una suerte de tablón de anuncios personalizado. Además, las empresas pueden añadir requisitos mínimos, métodos de contacto directo y hasta entrevistas breves por chat.
A diferencia de la versión anterior, esta herramienta incorpora medidas más estrictas contra la discriminación y los sesgos en la segmentación. Meta ha tenido problemas legales en el pasado por permitir que algunos anunciantes excluyeran a candidatos por edad, género o religión. En esta nueva versión, todos los empleos deben cumplir con normas claras de inclusión y transparencia.
El regreso de las ofertas de empleo a Facebook puede parecer un paso atrás, pero en realidad es una jugada estratégica. Con la caída del tráfico de publicaciones orgánicas y la saturación de contenidos, Meta está buscando nuevos usos para su plataforma que fomenten la interacción real. Y no hay nada más directo y local que encontrar trabajo en tu barrio.
A esto se suma la tendencia creciente de usar redes sociales para todo: desde buscar piso hasta contratar a una niñera. En muchas ciudades, los grupos de Facebook ya son una fuente habitual de información y recomendaciones. Formalizar estos canales en una sección de empleos parece una evolución lógica.
Este relanzamiento también responde al auge de la «gig economy» y los trabajos flexibles. Tras la pandemia, miles de personas buscan combinar trabajos puntuales o medio tiempo con otros ingresos. Facebook puede convertirse en un punto de encuentro ideal entre estos perfiles y negocios que necesitan cubrir puestos de forma rápida y sencilla.
Queda por ver si Meta logrará hacer despegar esta función o si volverá a ser abandonada como en el pasado. Lo que está claro es que la batalla por el empleo local digital se ha reactivado. Y esta vez, con más actores y reglas en juego.